Recientemente, reflexioné sobre una idea poderosa: la obsolescencia de la educación tradicional frente al espíritu emprendedor para lograr la libertad financiera
Muchos de nosotros hemos crecido con la noción de que el éxito reside en obtener buenas calificaciones, un trabajo seguro y ahorrar para la jubilación.
Sin embargo, en mi experiencia y observaciones, he notado que este camino a menudo conduce a una vida de limitaciones financieras, no de riqueza.
Dentro de cada uno de nosotros coexisten tres personajes: el pobre, el de clase media y el rico. Cada uno representa un nivel de pensamiento y aspiraciones financieras.
El pobre y el de clase media suelen buscar seguridad en un salario, mientras que el rico busca la libertad financiera y la creación de riqueza.
Recuerdo que en un libro de Robert Kiyosaki decía:
“Mi padre rico solía decir que un salario puede ser lo más dañino que se te puede dar, pues te convierte en un esclavo del dinero, anclándote en un ciclo perpetuo de dependencia”.
Robert Kiyosaki
La verdadera riqueza surge de la planificación, el enfoque y el aprendizaje constantes.
Los ricos adoptan estrategias que les permiten influir en sus inversiones, su dinero y su vida en general. Ellos entienden que su forma de pensar sobre el dinero y la vida es crucial para su bienestar económico. Sus pensamientos impulsan acciones que generan resultados.
Por lo tanto, te invito a reflexionar y a preguntarte: ¿En qué cuadrante te encuentras actualmente?
¿Estás preparado para tomar las medidas necesarias para moverte hacia el lado derecho del cuadrante de flujo de efectivo, donde reside la verdadera riqueza? Si tu respuesta es positiva, estoy aquí para ayudarte, contáctame.